Lujuria…

Siempre que escribo un post lo hago en base a alguna idea que tenga rondando la cabeza y ya después trato de robarme una imagen para poder representarla pero esta vez por mas que lo intente no pude encontrar una. Y aun si yo fuera buen dibujante no creo tener bien claro en la cabeza un concepto tan complejo y abstracto como la…

Lujuria

Antes de continuar mi querido lector podría serrar los ojos un momento e imajunarse una imagen que describa la lujuria en todos sus sentidos…

Yo lo intente y por más que quise lo que me salía era la imagen de alguna mujer o de alguna situación, pero al analizar la imagen no describía la lujuria. Y aun si les contara en concreto lo que podría visualizar alusivo a la lujuria aun así tal vez no seria comprensible para todos.

Tal vez la lujuria es algo que todos hemos sentido en algún momento de nuestra vida y cada quien enfocado a diferentes personas o situaciones. Y para cada quien es diferente.

Qué difícil es expresar un sentimiento con imágenes no lo creen???

Yo lo que más encontré que podría ser parecido a la lujuria o mas bien no… es lo que llamamos el hambre del vampiro. Y esa necesidad de algo prohibido obscuro y secreto. Que solo uno puede entender y saber controlar. Algo que crese desde los mas profundo del ser. Que nos puede llevar al borde de la locura.
Algo que agudiza los sentidos y nos hace receptores a la mas fina brisa y eriza la piel. Que nos llena de sensaciones de deseo. Y hace que la sangre hierva al grado de sentir su andar por las venas.
La lujuria y el hambre por la vitae son dos aspectos muy parecidos o por lo menos eso quiero pensar yo.

Solo que saciarlos puede ser igual de peligrosos. Igual de divertidos. O pueden no serlo.

La lujuria no nace de una necesidad fisiológica sino de las ideas y de lo intradiejetico. No es algo que se pueda saciar fácilmente con actos exteriorizados. Ya que lo que esta dentro de nuestras cabezas nunca será igual a lo que se puede encontrar en el exterior.

Eso es realmente triste y desconsolador.
Pero también es una gasolina muy potente para impulsarnos a hacer cosas que jamás podrías creer hacer. Y aunque nunca será igual a lo que se desea.

Vale la pena intentar saciar esa sed de lujuria.

Yo simplemente amor mi lujuria