Festival de la paella

Que se puede esperar de un festival de la paella pues antes de estar hay pensé que comería toneladas de esas salchichas que a mi gusto adquieren todo el sabor de lo que acompaña a su alrededor.
Mmmm ese delicioso sabor es de las cosas que mas me gustan comer.

Excepto que al estar hay párese ser que no muchos comparten el mismo sentimiento hacia esos deliciosos embutidos, pero en cambio los substituyen por la morcilla, chistorra u otros mas, aunque lo que predominan son los mariscos.

Y a pesar de las grandes propuestas que salían a relucir en las enormes paelleras en las que se cocinan.

el ambiente es de lo mas interesante y para mis ojos algo nuevo y único, todos asisten por diferentes motivos entre el desmadre y las ganas de conocer. Entre la incertidumbre de conocer cosas que tal vez nunca has probado y la experiencia de estar en un ambiente donde jóvenes y personas y personas ya muy vividas pueden compartir una copa de buen vino mexicano de casa española.

Mientras la tarde pasa con la música de trova, flamenco, banda y un tanto de pop de esos grupillos que suenan tanto en las emisoras de radio y en mtv.

Al final de la tarde cuando el cuerpo te anuncia que ya ha sido suficiente, con un poco de suerte te abras llevado no solo un par de botellas a precios excelentes así como un estomago repleto de experiencias nuevas.

También te llevas el sentimiento de haber estado hay y la satisfacción de no hacer de un fin de semana cualquiera solo eso, sino un gran fin de semana que se puede disfrutar como el buque del vino por un largo tiempo mas. Y eso es lo que impulsa a todos esos amantes de la buena comida y bebida a jurar regresar el próximo año y a algunos como yo a contemplar la posibilidad de algún día competir por el mejor sabor.